Fahrenheit 451…

Las democracias han muerto. O mejor, el teatro de la democracia ha dejado caer el telón. Los auténticos dueños del mundo han desvelado sus caras, antaño ocultas entre bambalinas. Los grandes banqueros y los mercados financieros han aplastado con puño de hierro las ya de por sí exiguas libertades de nuestro mundo libre.
No podemos confiar en el estado del bienestar, ese caramelo que hoy dan pero mañana quitan. No podemos confiar en los gobiernos, cuyo único interés por nosotros es cuando necesitan nuestro papelito en su urna para legitimar una democracia cada vez más ilusoria.
Como en la obra de Bradbury, vivimos en una época en la que la cultura arde. No se queman los libros, sino que se quema nuestra capacidad de alcanzar la verdad, de pensar por nosotros mismos, ahogada nuestra razón en un interminable bombardeo de banalidades, nimiedades, falsas informaciones, mentiras, propaganda, consumismo…
Este blog pretende ser una pequeña ventana al mundo detrás de la cortina de humo que el sistema ha montado para impedirnos ver. No poseemos la verdad, ni queremos adoctrinados. Queremos hacerte pensar, que te hagas preguntas, que venzas la ignorancia en la que el sistema quiere hacernos vivir. Que arda tu conciencia, pero con la rabia.

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